Viñas de Sarandí - Avellaneda, Prov de Bs As.

Viñas de Sarandí

Avellaneda, Prov de Bs As.

Paseo Dominguero

 

 

Cementerio de la Chacarita

Cementerio de Chacarita

Lacroze y Corrientes

Paseo

Monumental, olvidado, oscuro -como todo cementerio- en sus 95 hectareas alberga entre otros popes a  Alfonsina Storni, Pichuco Troilo, Augusto Vandor, Benito Quinquela Martín,  Pugliese... Recomiendo particularmente la tumba de Gardel, cita a la izq. de la entrada principal. (gran spot para encontrar turistas sajones +50, bien para conquista, asalto u otros) Otro imperdible: los kilometros de nichos subterraneos repartidos en 4 niveles que se extienden a lo ancho del cementerio.. Pero si uno quiere infringir la fronteras y corretear por su costado mas oscuro, puede darse una vuelta pasada la medianoche, cuando se transforma en zona roja y aparecen los zombies -edad promedio no baja de 85 años- q con poca ropa y a precios populares prometen inolvidable fellatio entre tumbas. 

 

Chichilo - La Paternal

Chichilo

 Cantina / Bodegón

Camarones 1901, La Paternal.

Cantina italiana elegida, en sus épocas de esplendor (las de él), por el indigestante Diego Armando Maradona.
Cantidades de camisetas, banderines y posters autografiados por arqueológicas estrellas ilustran la escena y son el marco para devorar el abanico de platos que ofrece el mismisimo Chichilo, en persona: pechugita de rana,  conejito al vino blanco, calamarettes a la calabria, caracoles bordalesa, calamar relleno, y mil etceteras.
Según Chichilo, no hace mucho que estan
en la esquina albiroja de Camarones y Terrero,
"Solo 52 años..."

La Universal - Floresta

La Universal

Pizzería

Av. Rivadavia y Olivera, Floresta

Paseando a la deriva por Floresta la encontré. Desprendía el olor del aceite a medio calentar. El clima barrial y el abundante exhibidor de porciones fueron razones suficientes para entrar, no ofrecí resistencia. Soy tan vulnerable al amor como a una buena porción de pomarola.
Pizzeria como las de antes, media masa y la muzza bien aceitosa. acompañado de un vino dulce tibión es lo que atrae a los peregrinos que llenan sus banquetas en la barra -eso cuando no están ocupadas por Rocco, el gato del lugar con libre acceso a todas las instalaciones.
Dicen los habitués que el lugar mantiene la apariencia de sus primeros días, hace aprox. 50 años. A juzgar por el estado general, les creo, y ojala nunca cambie.